La Pascua es una de las fechas conmemorativas
más importantes para los cristianos porque
se celebra la resurrección del Señor Jesús. Luego
de morir en la cruz, su cuerpo fue colocado
en un sepulcro, donde permaneció hasta su
resurrección. Es el día más importante para
los cristianos. Pero la celebración de la Pascua,
viene de mucho tiempo atrás, cuando el pueblo
de Israel permanecía esclavo en las manos del
Faraón. ¡Vamos a conocer mejor el origen de
esta fecha tan especial!
Los hijos de Israel eran duramente esclavizados
por el Faraón en la tierra de Egipto. El
pueblo trabajaba incesantemente, era castigado
con azotes, no tenía ningún derecho. Fue
por este sufrimiento, que ellos clamaron a Dios,
y la Biblia cuenta que Dios oyó esa oración y se
acordó de la Alianza hecha con Abraham, Isaac
y Jacob.
Fue entonces que Dios escogió a Moisés para
liberar a su pueblo. Pero como Él ya sabía que
no iba ser fácil, fueron lanzadas nueve plagas
sobre la tierra de Egipto. Asimismo el pueblo
continuaba esclavo. Dios anunció la décima
plaga: La muerte de los primogénitos (hijo mayor),
pero Dios no iba a permitir que Su pueblo
fuese afectado.
Dios ordenó que cada familia de Israel tomase
un cordero o cabrito. Este debería ser comido o
asado al fuego, con el pan ácimo (sin levadura)
y hierbas amargas. La sangre del animal debería
colocarse en los umbrales de las puertas. Este
acto simbólico de fe sería visto como una señal
para que el hijo mayor de aquella familia no
muriese. De esta forma se instituyó la Pascua.
Sabiendo esto, no te dejes llevar con los
comerciales de huevos de chocolate y otros
símbolos como el conejito, que aparecen en estas
fechas. La Pascua es una fecha cristiana que
reconoce al Señor Jesús como nuestro Salvador,
cuya sangre, como la de un cordero sin defecto
y sin mancha (1 Pedro 1.19), fue derramada para
darnos la salvación eterna.
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